Se denomina
hiperespacio a un aspecto del universo muy concreto que es experimentado por objetos que se desplazan a una velocidad superior a la luz relativa del fondo galáctico. Es una dimensión del espacio-tiempo que permite una velocidad superior a la de la luz y viajar a través de él elimina los efectos
distorsionantes del tiempo derivados de la relatividad. Un viajero
hiperespacial pasa tanto rato viajando como tiempo corre en el espacio real. Es una dimensión paralela al espacio real y cada punto de este está asociado con un punto único del
hiperespacio y por consiguiente los puntos adyacentes en el espacio real son también adyacentes en el
hiperespacio.

La idea básica de lo que es el viaje a
travez del
hiperespacio puede
comprenderse tomando una hoja de papel y marcando en ella dos puntos
relativamente alejados. La forma más rápida de viajar entre ellos es coger una regla y dibujar una línea recta que los una. Sin embargo, si nos fuera dado hacer trampas, cogeríamos la hoja de papel y la doblaríamos, uniendo
directamente los dos puntos, reduciendo así a cero su distancia y haciendo el viaje instantáneo. La hoja de papel es bidimensional; para unir los dos puntos la hemos doblado en una tercera dimensión. Nuestro universo es tridimensional; podemos hacer una analogía con la hoja de papel y suponer que lo doblamos en una cuarta dimensión para unir dos puntos alejados miles de años luz, haciéndolos contiguos. Esta cuarta dimensión sería el
hiperespacio. El
hiperespacio sería entonces ese otro espacio usado como atajo. Los principios de la
física relativista de
Einstein establecen que cualquier cuerpo móvil incrementaría de forma exponencial su
masa a medida que su velocidad se aproximara a la de la luz (c = 299793 km/s). Esta afirmación fundamental
anula la posibilidad de viajar a la velocidad de la luz, e incluso acercarse a ella, para cualquier objeto que viaje por el
espacio real.

La supuesta o
teorica tecnología de
motores de hiperimpulso logra franquear esta barrera, permitiendo a cualquier nave viajar a velocidades varios
múltiplos superiores a la de la luz, a través de esta
dimensión paralela espacio-tiempo, en la que las normas de la relatividad no se aplican. Además, tanto la nave como los viajeros espaciales no sufren los
efectos distorsionantes del tiempo y de la masa derivados de la relatividad, por lo que el tiempo de vuelo en un viaje por el
hiperespacio es idéntico al transcurrido en el espacio real.

Si uno investiga por
ahi puede llegar a encontrar otras
teorias como que el
hiperespacio no existe, es un concepto teórico. En realidad no se trata de viajar por el
hiperespacio sino de SALTAR por el
hiperespacio, por lo tanto no es un viaje, sino una
teleportación. La
teleportación cuántica existe, se ha demostrado, es un cambio del estado de una partícula que afecta al estado de otra partícula gemela, sin que importe la distancia a la que se encuentren.
En eso se basan los
agujeros de gusano, se desconoce si existen en la naturaleza. En cuanto a crearlos
artificialmente, para crear la puerta no hay más problema que desarrollar nuestra capacidad tecnológica, pero para crear la salida primero habría que ir allí por medios
convencionales, y eso lo convierte en poco práctico.

Pero dicho termino se lo conoce mas en las historias, libros y
peliculas de ciencia
ficcion. El término
hiperespacio lo inventó
John W.
Campbell en su relato corto
The Mightiest Machine, publicado en 1934 en la revista
Astounding, y desde entonces ha sido profusamente utilizado en multitud de obras. A veces con nombres distintos o dándole diferentes
tratamientos pseudomatemáticos, pero el concepto era siempre similar. En los 50 Isaac
Asimov utiliza el concepto en su visión de la historia futura del Ciclo de
Trantor, pero se abstiene sabiamente de tratar de explicarlo, aunque es presumible que acogió el concepto de su amigo
Campbell como recurso dramático necesario.

En 1965 En la Saga de
Dune, de
Frank Herbert, los navegantes de la Cofradía Espacial necesitan de la especia
melange para encontrar la ruta segura por el espacio, pero son máquinas las que permiten el viaje plegando el espacio y el tiempo permitiendo así el transporte
instantaneo, en una nueva muestra directa del
hiperespacio campbeliano. En 1977 En la saga de
Star Wars, las naves
frecuentemente "saltan al
hiperespacio", sin que quede claro en qué consiste esta técnica por más que se llame igual que las anteriores. Según se puede ver en algunas escenas, permanecen cierto tiempo en el
hiperespacio, como si este fuese un lugar físico, por lo que parece probable que el
guionista estuviese equivocando conceptos y en realidad no nos encontremos ante un
hiperespacio tal y como lo describía
Campbell, sino más bien de una ruta que acorte la distancia entre dos puntos, algo así como un agujero de gusano. O, más
probablemente, en un tipo de
hiperespacio distinto dentro del cual es posible moverse más rápido que la luz.
En 1985
Orson Scott Card parecía renuente a utilizar esta locomoción casi mágica en su saga de
Ender, pero finalmente, en la tercera entrega,
Ender el
Xenocida, se decide a inventar el salto instantáneo mediante un método que parece corresponder con el truco de
Campbell de doblar el espacio para juntar los puntos de inicio y fin de trayecto.
Como
podrán ver existen muchas
teorías, la
mayoría no no son incoherentes, inclusive leyendo libros de ciencia
ficción y
leyendo textos de
devaluación científica podemos ver ciertas coincidencias en las
teorías al respecto, lo
único que podemos determinar como
conclusión es uqe dicha tecnologia esta a muchos años luz de poderla desarrollar.
2 comentarios:
Entrar a tu blog me deprime.
Hace darme cuenta lo arruinado q me tiene internet ...
Entro, veo temas q me re interesan ... pero no puedo mantener la concentracion para leer jajajajaja
algun dia me sentare un fin de semana a leer TODO tu blog!!!!!
LO JURO!!!!
Es verdad internet nos tiene arruinados a todos pero que util que es, sigamos con nuestra adiccion.
Get a live in Internet.
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